Quien diga que no es celosa, que tire la Primera
piedra!... Y ahí, no nos van a alcanzar las piedras del mundo para
manifestarnos!... Creo que todos tenemos una cuota de celos en todo lo que
queremos, y esto va más allá de las parejas… Porque dentro del concepto
“querer” y “amar”, se encierra el instinto básico de posesión… Si queremos
algo, lo queremos poseer… Y poseer es que sea mío, es cuidarlo para que no me
lo quiten, es estar alerta para que no le pase nada… Así que tener “celos” es
una parte del amor también, es una manifestación del amor diría yo… El tema acá
es ¿Cuándo los celos pasan de ser amor a obsesión?... ¿Cuándo se cruza la
barrera de lo natural a parecer Glen Close persiguiendo con el cuchillo a Michael
Douglas en Atracción Fatal?... ¿Cuándo vamos por la vida “Celosamente
Desesperadas”?...
La verdad, que yo siempre estuve dentro de la
categoría de las “No Celosas”… De hecho, me ha pasado de tener que simular
celos para ponerle onda a la relación! Jajaja… Siempre confié en la persona que
tenía al lado, porque es la mejor elección que se puede hacer… Y si, la
Confianza es una elección también!... Uno puede elegir confiar o no confiar… Yo
no creo que sea solo un sentimiento… Obviamente, hay personas que son más
confiables que otras… Hay personas que con hechos nos demuestran que no lo son…
Pero muchas mujeres y hombres, no confían de entrada… Y en eso me baso en
pensar que la confianza es una elección…
Yo elijo confiar, por mi… No se vayan a creer que lo
elijo porque soy la Madre Teresa de Calcuta!... Noooo… Elijo confiar porque eso
me trae más tranquilidad que no hacerlo… Que estar pendiente de ver si me
engaña o si no me engaña… De si me dice la verdad o no… Elegir el camino de “no
confiar” es elegir el camino de la “auto-tortura”… El camino de los fantasmas
que te acompañan siempre… Que te acosan, haciéndote pensar todo el día en que
la otra persona está haciendo algo malo, que no te quiere, que te miente…
Camino que no solamente te lastima y te hace la vida imposible, sino que
termina rompiendo la relación… Pero por sobre todas las cosas, un camino
irreal!
Cuando digo que los Celos Extremos, son un camino
irreal, me baso en el hecho de que es un camino que no te lleva a ninguna
parte… No te soluciona el problema, todo lo contrario, lo agrava… He visto
mujeres buscando pelos en la cama!... Revisando teléfonos, facebooks…
Persiguiendo a su pareja hasta el grado del “acoso”… Y hombres también, eh?...
Pero, ¿Eso soluciona algo?... Pues no… Porque hay una máxima que no tiene excepción
en la vida: “Si te quieren engañar, pues te van a engañar”… Podes perseguirlos
todo el día, que si te quieren engañar, van a encontrar el momento… Es como
cuando los padres no quieren que la nena llegue después de las 23 hs, y resulta
que la nena, se mata en un Telo a las 15 hs a la salida del cole…
Una vez escuchaba la radio y estaban entrevistando a
un recepcionista de un Albergue Transitorio, dícese “Telo” para los amigos… Y
el periodista le pregunta: “Seguramente los viernes y los sábados a la noche,
explota el telo, no?”… Y el pibe tranquilamente responde: “¿Sabes que no?... El
telo explota de lunes a viernes de 12 a 14 hs!”…. jajajaja.. Y Claro, horario
“Pirata”… Cuando los tramposos salen a almorzar en día laboral!!... Por eso,
nunca entendí tampoco a las mujeres que no dejan que sus parejas salgan con sus
amigos a la noche… Hay muchas así, eh?... ¿YYYYY?... ¿Qué nos asegura eso?....
Pues nada, porque el tipo tranquilamente, se curte a su secretaria el mediodía
todos los días, vio?... Así que focalizar esos “celos” en un horario o en
salidas puntuales, es tan irreal como los cuentos de Princesas… 
Obviamente, un poco de celos es necesario en la
pareja… Porque la falta total de celos es la indiferencia… y en eso, las
mujeres a veces perdemos un poco el norte… Si nos están demasiado encima,
sentimos que nos acosan, que nos asfixian, que nos controlan… Pero si no nos
dicen nada, “Ahhhh, entonces ¿no te importo?... ¿Te da lo mismo que salga con
esta minifalda tan cortita?”… A veces, entender lo que queremos es más difícil que
entender la física cuántica ondulatoria!... Casualmente, porque ni nosotras
sabemos bien qué es lo que queremos y necesitamos…. Que nos celen todo el
tiempo, obvio que no… Que nos den libertad absoluta, por supuesto que tampoco…
A ellos encontrar un punto medio que nos convenga!!!!....
Los celos “medidos” son un condimento para la pareja…
Sin lugar a dudas… El problema es cuando los celos se convierten en obsesión…
en acoso… y he conocido muchas mujeres que cruzan esa barrera… Hombres también,
pero bueno, a los hombres que les escriba Lucrezio!... El tema es que he visto
mujeres que traspasan la barrera de los celos para convertirse en “acosadoras”,
limite psicópatas, que persiguen a sus hombres hasta alcanzar niveles insanos…
Los llaman todo el tiempo, desconfían, los espían… Los persiguen… Quieren y
exigen que las llamen todo el tiempo, que les informen donde están, que hacen…
Y obviamente, igual no están satisfechas y viven en un mundo de dolor y
desconfianza…
Justamente ayer, vi un programa en la tele que hablaba
de los celos. Una mujer de 25 que acosaba a su pareja todo el tiempo… Su
justificación era que como el tipo la había engañado una vez, entonces ella no
confiaba… Pero eso no es más que una excusa… Antes era igual… Había una coach
que les hablaba y trataba de contenerlos…. Para que la chica entendiera un poco
la situación, la invita a salir a dar un paseo, y mientras ella caminaba, la
coach caminaba pegada a ella… la empujaba y no se despegaba… Al principio la
chica se reía pero cuando veía que perdía el equilibrio, que sentía calor, que
no podía caminar, empezó a molestarse un poco… Y a los 15 minutos, tuvo un
ataque de furia y terminó llorando de la impotencia… La coach le dijo, “Eso, es
lo que siente tu pareja con tus constantes llamadas, mensajes, acoso y
persecuciones”… A veces nos obsesionamos tanto con el otro, que no nos damos
cuenta, que nuestras acciones lo agobian, lo asfixian… Y lo peor, es que no solo
no ganamos nada, sino que terminamos cansándolo… Y con justa razón!...
Si solamente entendiéramos, que simplemente, cada uno
es dueño y responsable de sus actos… Y que nada de lo que hagamos, va a hacer
que la otra persona no haga lo que tiene ganas de hacer… Si entendiéramos que
la desconfianza solo nos tortura, nos acosa a nosotras mismas… Y que elegir
confiar, te permite vivir mejor, feliz, tranquila… Si el otro te engaña, pues
es SU problema… ¿No es él, el que debería estar intranquilo e infeliz?... Si
nada de lo que haga puede cambiar las acciones del otro, ¿Por qué no elegir
vivir y ser feliz confiando?...
Ahora, de donde vienen esos celos?... Porque de alguna
parte deben venir… Bueno, vamos a ver si encontramos una respuesta en la
próxima Entrada…
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